Trebejos y Transparencias

Si me dieran a escoger, entre ser, alguna de las distintas piezas del tablero de ajedréz, creo, con carácter definitivo, que mi elección no recaería necesariamente sobre una pizpireta, hermosa, peligrosa, atractiva y belicosa Reina, sino, en un elegantísimo Alfil, como pieza afín.

Acrocéfala, punzante, hecha de hueso de manzana o de elefante; desplazarme por una vereda sinuosa o pasearme diagonalmente sobre un campo bicolor. Confabulando, organizando y dirigiendo a mis huestes sobre el campo del honor.

Pero..., "realidades Chica": Virulenta, casquivana, desordenada; definitivamente, quienes se pongan en mis manos, no tendrán aquello llamado futuro. Y no estoy hablando a nivel personal, sino, sobre mis habilidades frente a un tablero de ajedréz y que sólo son comparables con mi capacidad para tragar sapos sin respirar o cruzar la autopista con los ojos vendados. En ajedréz, soy un cero tan grande como una enorme roca cayendo vertiginosamente, cuesta abajo, hasta terminar sumergida en lo más hondo de un fango marrón.

Yo, y los juegos llenitos de ciencia como factor vinculante no caminamos por la misma vereda, y si nos topamos en ella, llevamos destinos distintos.

Resultaría, sencillamente, oneroso y frustrante referirles cada una de mis experiencias frente a un tablero de ajedréz. Si en mi haber, existen algunas partidas ganadas es que he utilizado artes "mágicas" y "telequinéticas" (las manos son más rápidas que la vista) para reordenar las piezas sobre el tablero... Lo único destacable es, mi apostura y grave semblante al iniciar una partida; todo lo demás, una lágrima...

¿Y toda esta enredadera por qué? Porque hace un par de semanas, con la frescura de una brisa en verano bizarro viene publicando su blog, una auténtica y genuina campeona de los trebejos: La Femme Ollanta (Luciana); cualquier parecido, similitud o relación con el movimiento etnocacerista es inexistente; creo que ella lo explica con mucha mayor gracia en su blog. Usa un lenguaje coloquial, ameno, inteligente y diáfano como gotitas de agua mineral... Bienvenida Luciana.

Siendo hoy, el día de los blogs, según mi agenda personal debo señalar, también, a otro blog, que viene dictando cátedra en diseño gráfico. El blog es de Rafael Sencebe . Hace un par de días nos enseñó a desaparecer personas (si esa técnica virtual se aplicara a la realidad nuestra, cuanta gentita incompetente desaparecería ¿no?) virtualmente. Un curso gratuito de diseño gráfico que en cualquier sitio nos costaría un ojo de la cara. Aquí una pequeña muestra de sus clases. Como ven el resultado final es el modelo convertido en un coquetísimo fantasmita.

(Más diseños y cómo hacerlo en la página de Rafael)

Link de las Páginas

La Femme Ollanta (Luciana)

Rafael Sencebe

Sei Mong Se Jun

Pinceles cargados recorren lienzos. Decenas de ojos, centran su atención sobre la modelo que luce desnuda, impertérrita y quieta. La impronta de sus formas se deslizan, bajo diestras manos que se mueven como bandada de palomas, y se fijan, progresivamente, en el corazón de los caballetes.

Jiney, una bella adolescente cuya principal motivación, y única diría, está en la fotografía, deposita, ahora, todos sus sentidos sobre la tela. Anson, su compañero en la escuela de arte, la observa: Jiney, es sumamente atractiva a sus ojos.

Al finalizar la clase, Anson trata de abordarla. Jiney, no muestra el más mínimo interés ni ánimo para entablar un diálogo; corta de plano cualquier intento de acercamiento y deshecha, sin miramientos, una invitación. Jiney, señala a Jasmine, su prima, que los observa; ya tiene una cita pactada. Se va con ella. Anson, las mira alejarse, no sin antes recibir un "fuck you", no muy sutilmente, por parte de una molesta Jasmine.

Jiney y Jasmine son muy unidas, en un plano que va mas allá de lo sanguíneo, amical y de su afición por la fotografía... Buscan temas urbanos, pero parecen hartas de no encontrar elementos nuevos. Jiney, encuentra un estupendo ángulo y click... Sola, en el cuarto oscuro de revelados, Jiney, fumando insatisfacciones no siente que la toma tenga algo especial. Se siente obnubilada, vacía, sin ánimos. Escucha el llamado de su madre; prefiere no oir; apaga con premura el cigarrillo al sentir sus pasos aproximándose.

Mira a su madre con la misma frialdad que lo haría con un objeto inanimado. Le puede dar todo lo material menos lo más importante...

Con su monotóna y gris vida, a cuestas, recorre las calles. Su mirada denota una tristeza interior que ella apenas entiende, como una herida mal cicatrizada... Un accidente fortuito estaría a punto de cambiarle, radicalmente, la existencia. Es testigo de un accidente automovilístico; el ocupante del vehículo luce herido; en el suelo, yace una mujer. La escena la asusta y desvía su mirada. La conciencia vuelve en forma de una cámara fotográfica que aparece a su siniestra. Se coloca tras el lente, asustada o atraída saca una y otra toma, y capta el instante final, la muerte.

Tras una breve discusión con Jasmine cree haber encontrado su toma ideal. Pero después no lo considera así, aunque despierta en ella, cierta fascinación por la muerte, por el momento exacto de la muerte...

Así empieza Sei Mong Se Jun (Abnormal Beauty) con Race Wong, que encarna a una rebelde adolescente cuya interés parece centrarse ahora en la muerte. Los flash backs, muy bien colocados, recrean genialmente instantes de su pasado que nos ponen al tanto de su conducta actual. Una película con escenas fuertes (snuff) y sutiles toques lésbicos que le dan un aire peculiar e interesante.

Una escena a destacar es cuando Jiney toma el preciso instante en que una adolescente se suicida. Con una pasmosa seguridad sigue el recorrido... Imperdibles y muy fuertes, por cierto, las partes snuff.

Descubrir su pasado, tiene un precio muy alto. Enfrentar sus temores se vuelve una verdadera pesadilla. Un thriller psicológico con cierto aplomo, toques snuffs y con un quiebre inesperado. Recomendable. Tiene un aire a "Tesis", "Torero" y a "Bajos Instintos" (leves brisas).

Una película que se aleja de los convencionales temas adolescentes del cine americano y que nos acerca al cine tailandes del director Oxide Pang Chung y como productor a su hermano Danny. Ambos, son los realizadores del famosisímo The Eye. En esta película (Sei Mong Se Jun), también se encargan de la fotografía, música y edición. Una película recomendable para verla en casa y con los cinco sentidos puestos en ella. El suspenso es buenísimo.

(A nuestro país llegó con el título de "La hija del Diablo", que la verdad no me parece el título más apropiado.)

AB-NORMAL BEAUTY
(Sei Mong Se Jun)

Dirección y Guión: Oxide Pang
Producción: Danny Pang

Cast:
Race Wong (Jiney)
Rossane Wong (Jas)
Anson Leung (Anson)
Michelle Mee (Mamá de Jiney)

Tailandia - Hong Kong, 2004, 101 minutos

Marilyn, Toledo y Kennedy

"Nunca he sido una puta. Siempre me he mantenido a mí misma" (Marilyn Monroe)

!Qué delicioso estremecimiento! Sentir tus fuertes manos acariciando, con gran sutileza, como si tuvieras miedo hacerme daño, mi cuello, mi espalda, mis hombros, todo mi cuerpo; recorriendo y explorando cada curva, cada recoveco y terminando con unos agradables masajillos en los pies... Contando, cada orgasmo con granitos de maíz y susurrándote al oído: "John..., John..., happy birthday Mr. President, Happy birthd... ¡Aaaaay! to me". Sentir tu voz en mi oído: "Marilyn..., Marilyn". Abrir mis ojitos y toparme con los tuyos, tan claritos y tu sonrisa, ¡qué hermosa sonrisa!, como la de un niño travieso y yo: "Estoy a su total disposición señor presidente, en lo que Ud. desee y ordene", y él, tomándome la palabra... Besándome el cuello, los hombros y yo casi arrancándole sus dorados cabellos. De un tirón lo haló de sus cabellos, que ahora parecen crines, buscando sus labios y me encuentro con un espectáculo desagradable... ¡Este no es mi presidente...! ¡Es el presidente de todos los peruanos...!, que con su típico timbre quejumbroso repite: "Te necesito, Fernando...¡Perdón Lucrecia!...¡No, Lady!...¡Elianne, Elianne! Lejos de ser una lujosa habitación en el Carlyle de Nueva York, ahora me veía en una huachafa habitación de Las Suites de Barranco ¡Ajjj, Joder! Por una cuestión de supervivencia, buen gusto y de higiene mental decidí despertar...

Anoche, estuve leyendo sobre el romance de Jhon y Marilyn. Sobre sus encuentros clandestinos y de todo una nube de gente tratando de cubrirles las espaldas. Una muy enamorada, sufrida, atormentada Marilyn que anotaba, por recomendación de su psicoanalista, todos los pormenores de su vida en aquel peligroso, en ciertas manos, Diario Rojo (buen título para mi próximo blog). Muchos consideran que al convertirse, esta relación, en un peligro de estado, se optó por sacrificar a la diva. Dios, perdona el pecado, mas nó el escándalo. Y hay quienes se toman en serio el papel de todopoderosos (Hoover, Vladimiro...).

Comparar a Kennedy con Toledo sí que es un escándalo; aunque mi punto es que, nadie está libre de los escándalos de alcoba, o de drogas que nada tiene que ver con políticas de estado o de un buen o mal gobierno, pero, que pueden y son usados como fuertes mecanismos de coacción, chantaje; como vemos en muchos casos a través de la historia y en la actualidad...

En Estados Unidos, es célebre el trabajo de Hoover. Siniestro personaje, jefe del FBI y conocedor de muchos secretos a lo largo de 8 presidencias. Entre sus, extensísimos, archivos secretos se encuentran las canitas al aire de Marthin Luther King, los flirteos de Nixon y obvio que harto material sobre Jhon y Marilyn. Sobre Luther King, al consignar su nombre no creo restar méritos a su enorme y loable labor en pro de la igualdad. Pero, ya saben como es de sucia la política (y de sucio éste blog) que si no pueden vencer a sus oponentes con argumentos son capaces de esgrimir íntimos, y muy íntimos, trapitos sucios. "Con la misma vara que mides serás medido...", reza un viejo, gastado pero puntual refrán perfectamente aplicable a Hoover. La mafia consiguió fotografías de Hoover en una situación sumamente incómoda (como la canción de Susy: "Te toco la ..."), como incómoda fue la posición de Mónica con el presidente Clinton. Hoover, tuvo que pagar el secreto de su homosexualismo con un precio muy alto: El silencio.

Antes de pasar a nuestro país, sólo quiero tocar el punto de Clinton (y no me refiero a su zona favorita). A pesar del escándalo, de la incorruptibilidad y tenaz seguimiento del caso por el juez Kennet Starr, de las vergonzosas explicaciones, en público, de Clinton; ésto no pasó de ser un hecho irrelevante dentro de la historia. El carisma de Clinton y cierto éxito de su gobierno, fueron factores importantes para que saliera muy bien librado de "polvo y paja". Comparar a Clinton con Toledo, tampoco, ¿no?..

Nuestro país, también es rico en escándalos. Viene a mi mente la tradición de Ricardo Palma, que recoje de otra fuente, y donde se cuentan las escapadas subreptcias de un Virrey. Palma, recrea el tema de manera amena... Pero, yendo a épocas más recientes debo de mencionar al Presidente Leguía (bueno, no tan reciente) que en su momento estuvo en el ojo de la tormenta por haber tenido hijos fuera de su matrimonio. Odría, y su bochornosos escándalos que consignan una rotura de cadera. El presidente Belaúnde, cuyo divorcio, y las motivaciones de éste, no fue muy bien visto por la cucufata sociedad de su época ("cosas del amor"). Dentro de la clasificación de "Leyendas Urbanas" se cuentan de las escapadas nocturnas de Alan García (con 15 años menos y kilos también), enfundado en cuero negro y montado en una motocicleta en busca de alguna aventurilla...

Lo de Toledo, estigmatizado por el escándalo, pierde charm por la torpeza de sus actos. Lo de Lucrecia pudo haber pasado "piola" pero su torpeza al no reconocer a tiempo a su hija le ganó la antipatía de un grueso número de personas. Lo de Lady, una canita nomás...

El meollo de la situación se encuentra en un "famoso" pero todavía no presentado video que, para muchos "politólogos", analistas y morbosos se encuentra en las manos de Olivera. Aunque otros señalan como poseedor del mismo a Vladimiro (El Hoover peruano).

Repasando los pormenores de esta historia me remonto al 16 de octubre de 1998. Toledo salió de su casa con dirección a ESAM para dictar una conferencia. Nunca llegó. La "bruja" preocupada (perdón Elianne) junto con Alfredo Noboa (decano de ESAM) presentaron una denuncia en la comisario por el presunto secuestro del "Cholo sagrado".

En la noche, Toledo llegó, silbando muy tranquilamente, en su propio auto a su casa. La policía lo interrogó de manera informal y el negó la posibilidad de un secuestro. Presionado por la "bruja" (perdón Elianne) fue a una clínica a hacerse unos análisis. El caso estaba prácticamente cerrado sin siquiera abrirse.

Tiempo después, Caretas sacó una noticia bomba: Los resultados de los análisis de Toledo. Estos arrojaban la presencia de fenobarbital, usado antiguamente contra la epilepsia y como anestésico en veterinaria (un diazepán era insuficiente para el cholo), en la sangre, y en la orina, trazas de cocaína.

La noticia trajo cola. Para menguar la situación Toledo, asesorado por Elianne, Rospigliosi habló de un secuestro. Incluso, tiempo antes de divulgarse la noticia, en una universidad había dejado abierta la posibilidad de la aparición de un video con la intención de tumbar su campaña (la mafia fuji-montesinista).

Creo que todo esto es historia conocida. A las manos de Hildebrandt llegaron dos videítos. En ellos se muestra a un presidente en lamentable estado de ebriedad y desnudo, y en el otro miccionando en la vía pública (eso sí que es escandaloso y nauseabundo). Videos nada sexis pero que estaban tanteando el terreno para otro con situaciones mas comprometedoras. Se supone que aquel video consigna a Toledo "jalando" coca y sosteniendo explícitos encuentros sexuales con más de una fémina: Un video recomendable para los que tienen "buen estómago"...

Que si lo tiene Olivera, Montesinos o los periodistas y que es usado para manipular al Presidente es ir al terreno de las presunciones..., pero lo que hay que destacar, con seguridad, con videíto o no es que, quien le hace más daño a la figura presidencial, es el propio Presidente con tanto despropósito, patinada y sobre todo con: ¡Qué bonita familia!

Drogas: ¿Legalizar o no legalizar?..., he ahí el dilema.

Una tímida pregunta encabeza este post, pues, me encuentro en el limbo de la conciencia... ¿Se puede erradicar o por lo menos reducir el consumo de drogas permitiendo su libre uso? (la pregunta del millón. La respuesta es invaluable).

Revisando un poco de historia, me encontré con un tema harto conocido. En EE.UU. de los años veinte existía un personaje, Al Capone, que a través del comercio ilícito de licor amasó una gran fortuna y un enorme poder en distintas esferas de la sociedad estadounidense. Como él, aparecieron, decenas, más a lo largo de todo el territorio americano que haciendo uso y abuso de su poder económico y de la intimidación pusieron en jaque a la justicia. La corrupción campeaba. La denominada Ley Seca no mermó, en absoluto, el consumo de bebidas y más bien contribuyó a elevar su precio resultando un negocio, a pesar de los "riesgos", redituable. A Al Capone sólo lo pusieron entre rejas por evasión de impuestos y salió en pocos años. Cuando se legalizó el comercio de bebidas alcohólicos se democratizó, si cabe el término, el mercado eliminando los monopolios.

Colombia, país vecino, el más importante proveedor de droga a nivel mundial atraviesa, desde hacer muchos años, por una peliaguda situación. Los carteles y los grupos guerrilleros financiados por los primeros han sembrado de terror y la muerte a aquel país. Por eso, propuestas como la de Juanes, que está de acuerdo con la legalización de la droga, no suenan del todo descabelladas. Resulta un hecho increíble, enterarme ahora que, Pablo Escobar, un importante, mítico e infame narco llegó a ser elegido congresista. Tuvo, un final trágico, acorde con su vida, y permanece aún en la memoria de mucha gente que se olvida de los daños por él perpretados y que sólo recuerdan sus magníficas contribuciones económicas. Para países como los nuestros, carentes de justicia y llenitos de desesperanza cualquier benefactor puede llegar a ser un mesías.

Se han hecho experiencias con respecto al tema. Holanda, un moderno país europeo, permite el consumo de drogas en bares exprofesamente destinados para tal fin. Se podría considerar a la experiencia como mala si se toman en cuenta los resultados: Se elevado el consumo hasta en un 200 %. Holanda, constituye un excelente destino "turístico" para quienes desean dar rienda suelta a sus adicciones. La prioridad en algunos países de Europa (Holanda, Inglaterra, Suiza) ha sido evitar el incremento de VIH y otras enfermedades transmisibles a partir del uso de jeringas. Los gobiernos, proveen gratuitamente las jeringas, y con ello se han reducido los casos de contagio pero de manera indirecta ha contribuido a elevar el consumo de drogas. Se destinan ambulancias y personal paramédico para que recojan a las personas intoxicadas. Es decir se combate las consecuencias y no al problema en sí. La legislación es clara, se establece las diferencias entre consumidor y comercializador. El consumidor no deja de ser un ciudadano.

Países como en el caso de Pakistán dependen en buena parte de la producción y comercialización de estupefacientes (hachís. Que no es un estornudo. De todos modos, gracias).

La propuesta de legalizar el consumo y la fabricación de drogas descansa en la base de erradicar, con esta medida, mafias y monopolios con gran poder que fomentan la corrupción y el caos. Y también, que quitarían lo atractivo que resulta lo prohibido.

Lastimosamente, en el caso nuestro, el precio de las drogas es relativamente bajo, somos un país productor, y la legalización sólo contribuiría a ponerlo al alcance de todos, y siendo tan parcos en fuerza de voluntad, maleables a la presión del círculo social, entonces, el resultado podría ser una bomba de tiempo y si a eso le sumamos una deficiente educación, todo esto daría como resultado un incremento desordenado de personas adictas. Se habla de especialistas en el tema; médicos encargados de dar una adecuada prescripción y con ello la apertura de un nuevo campo laboral. Pero, cabe preguntarse: ¿Existen drogas inocuas? La mayoría crea dependencia y distorsiona a los sentidos. Eso es claro.

Decisiones tan delicadas no deberían recaer sólo en políticos sino también en especialistas (médicos, psicólogos, etc.). Aunque todo esto no deja de estar en el terreno de la presunción no debe de estar muy alejado de la realidad. Igual dilema se enfrentó, en su momento, con el alcohol y el tabaco; que en cierto modo son adictivos y crean problemas similares al consumo de drogas; ambos son socialmente aceptados; en cuanto, al licor, hay personas alcohólicas que han destruido su vida por él y se encuentran en un camino sin retorno. La droga, tal como la conocemos en la actualidad, es decena de veces más adictiva y de comprobados daños (irreversibles) a nivel neurológico. Existe un importante grueso de personas que la consumen bajo su propio riesgo y de manera "controlada". No nos podemos tapar los ojos ante esta realidad y menos estando tan cerca del problema. Dos veces consumí drogas (éxtasis y un porrito de marihuana) y no me fue necesario ir más allá que a la puerta de una discoteca y pagar, nada.

Yo, ya elegí mi droga y creo que ha sido una excelente elección. Mi mejor droga es la actividad y el amor que recibo a cada instante. Los problemas existen y existirán después de regresar a la realidad; la moda, la presión de los amigos es fácilmente manejable con un poco de amor propio. El camino de las drogas es un camino espinoso y muchas veces sin retorno. Un camino que te saca de la realidad y que te coloca en el fango de la irresponsabilidad y del escaso juicio.

La elección es libre y nunca está demás tomar consejos para orientarse al respecto.

¿Legalizar o no legalizar?..., he ahí el dilema.

Un dulce calorcillo

Una de las cosas que más aprecio de un fin de semana es, despertar, un domingo junto a papá y a Laura. Lo de Laura, es historia reciente pero no empaña, en absoluto y lo digo sinceramente, el recuerdo de papá y mamá, juntos.

Los sábados, no importando la hora, iba a la habitación de mis padres. Ellos veían la tele y yo irrumpiendo descortesmente me ponía en medio de ambos. Lo que me agradaba de todo eso, era sentir el calorcillo que manaban sus cuerpos y que me hacía sentir como a un pollito en su cascarón. Papá, con sus lentes y su barbita de un día, miraba con mucha atención la tele. De tanto en tanto volteaba y me sonreía. Mamá, acariciaba mis cabellos y me daba besitos en la frente.

Ahora, acomodada bajos de los pies de papá y Laura, me parece que el pasado ha regresado, un instante, en forma de añoranza. Papá luce algo cano, con los mismos lentes de antaño y unas cuantas arruguitas furtivas apostadas en su frente. Laura, todavía muy joven, apoyada en su hombro acaricia su pecho y pancita; la escena parece venida del pasado para hacerme compañía...

Papá y mamá, estuvieron separados por un período de dos años. En aquel tiempo yo era muy pequeñita y con los pocos recuerdos que tengo trato de reconstruir el pasado.

En todo ese lapso tuvieron tibias reconciliaciones. Una de las cosas que jugaba en contra, era el orgullo de ambos. Papá era muy fuerte de carácter, no era de rogar o conciliar sino de imponer sus razones. Mamá, por su parte, se mostraba orgullosísima y siempre a la defensiva. Estuve, sólo en un par de ocasiones, presente, en esas discusiones. Tatita, cogiéndome de la mano o cargándome si fuera preciso me conducía a otro ambiente de la casa. Con el volumen muy alto de la tele trataba de aplacar, sin mucho éxito, el tronar de voces en el living.

En una de esas reconciliaciones, recuerdo que fuimos a Chósica. Papá dictaba clases en la Cantuta. Papá nos llevó, supongo ahora, al mismo centro de Chósica. Lo que más recuerdo es un puente colgante sobre un río que arrojaba sus aguas en forma de garúa. Ellos, caminaban juntos; en más de una ocasión intentaron cogerme de las manos para que fuera en medio de ambos; yo, me soltaba, prefería ir sola y ver, tranquila y curiosamente, las cosas de un mercadito costumbrista. Sólo, cuando atravezábamos aquel puente, buscaba sus manos.

Ellos se sentaban a conversar en alguna banquita libre, mientras que yo me dedicaba a mirar a las personas que transitaban por el lugar y a explorar en los alrededores. Y Me perdí; me sentí perdida, por lo menos. Sólo sentía mucho movimiento alrededor mío y decenas de caras desconocidas. Una sensación de vacío se apoderó de mí. No daba un sólo paso; simplemente me quedé petrificada. Hasta que alguien acarició mi cabeza y yo estallé en llanto. Mucha gente curiosa apostada a mi alrededor y de en medio de ellos surgiendo papá y mamá. Papá me cargó y mamá, con sus ojitos cubiertos de humedad, nos dio un fuerte abrazo. Allí, por vez primera, pude sentir, con total claridad, aquel calorcillo tan agradable.

Spams no deseados en blogger

Una forma de evitar que vuestros blogs se llenen de Spams (propaganda, avisos comerciales) "jodidos" (molestos) es activando:

Mostrar verificación de la palabra para comentario SI

Ubicada en Opciones/Comentarios

Con esto se podrá evitar, en parte, que nuestros blogs se llenen de estos "pesados" .

Esta opción es sólo válida para bitácoras hospedadas en Blogger.

Me dirán "Colón (a)", si eso ya se sabía hace mucho... Pues, me acabo de enterar y la he activado hace poquito. (Todavía no encuentro la opción para recibir comentarios galantes. No tardo en encontrarla)

Saludos

Y buen fin de Semana... Chau

¡Fin de Semana... Fin de Semana!

Otro fin de semana largo (I love you Perú). Como si al sábado le quedara corto el domingo, tendremos que añadirle Lunes y Martes: ¡Genial! ¡Yo feliz! "!Tengo el orgullo de ser peruana...¡". Lo que si me alegra y esto lo digo dejando al lado, sólo un instante ¿eh?, el sarcasmo es no verle la cara a ninguno de la oficina hasta el miércoles, eso sí que es un verdadero descanso (ya les contaré por qué). Apropó, aquí entre nos, ¿el feriado por qué ah? No sé e importa poco, ¿no? !Uy, Santa Rosita, de veras!, me voy a condenar, aparte de despistada, blasfema...

Lo que me jode de los fines de semana largos es de todo el tiempo efectivo que se pierde. !Claro!, que algunos me van a decir que se rompen el lomo día con día y que unos días de descanso no vendrían nada mal. Sin embargo, me voy al caso de aquellos que no cuentan con un empleo seguro, y no estoy divagando, lo digo con conocimiento de causa. El tío Gustavo cerró la fábrica a partir del viernes y la reabre el miércoles, como una forma de no pagar doble por los feriados. Les dio, a sus trabajadores, un sencillo para que se compren un chancay y los espera de vuelta, y con alegría, el miércoles muy de mañana...

Mientras algunos, alistan maletas para ir a algún lugar paradisiaco y de relax total, a otros no les queda mejor consuelo que viajar hasta una concurrida esquina y ahogar sus penas en un vaso de licor. Algunas cosas si que joden.

Acusan a los peruanos de ser ociosos, lamentablemente, tenemos esa fama mal ganada; pero quién fomenta estos largos días de vaca... la respuesta es obvia. Pueden haber muy buenas excusas (fomentar el turismo interno) pero que no me convencen.

El viernes, como lo tuve libre, hice de maestra suplente. Y no es que la profesora haya adelantado sus vacaciones sino que tenía un cursillo. Ni corta ni perezosa me comprometí con la tía Elsa a darle una mano. La seccion correspondía al tercer grado para niños de 8 años.

No es que yo busque meterme en líos, pero como podría explicarlo ("¿los líos me persiguen?"). Los niños, no eran precisamente angelitos. Las niñas me ayudaban, ¡eso es lo que más me agrada del gremio! La auxiliar tuvo que venir un par de veces en mi ayuda. Para distraerlos los puse a leer, pero se distraían, en otras cosas, más rápido y el caos otra vez. Saqué a uno para lea al frente y apenas se entendía lo que decía (si leyeran como juegan que distinto sería todo). Lamentablemente, pude corroborar, la deficiencia en la lectura de la gran mayoría de niños. Si apenas leen es imposible que entiendan. La campana de salida fue lo que más les motivó: con gran alegría dieron inicio a sus mini-vacaciones. Se supone, que es el gobierno de la educación pero no veo algún avance significativo. Tampoco, creo que, podemos esperar con los brazos cruzados que un gobierno atragantado de una burocracia inepta haga algo más allá de sus "posibilidades". Parece que muchos padres no se toman en serio el papel como tales y delegan todo el peso de la educación a los colegios. Eso me parece inaceptable y una forma de renunciar, en buena parte, a sus responsabilidades.

Todos somos responsables del estado de pauperización educativa que cada día avanza hasta alcanzar niveles intolerables. Es terrible ser testigos presenciales de cómo se destroza al idioma y de la manera informal como se asumen las cosas. Nuestra cultura involuciona y nosotros ponemos nuestro granito de arena. ¡Feliz fin de semana largo! y yo me largo a Punta Sal.

El Tío Manuel

Ayer, muy temprano, atendí a una llamada telefónica. Una voz muy familiar preguntó por mi padre o por Laura. Ambos, hacía buen rato que, habían salido. Sólo después de unos segundos pude reconocer en aquella voz a tía Lupe. Sin mostrar contrariedad y con una voz muy clara me dejó el siguiente recado: "Dile a tus papis que el tío Manuel está en la UCI del Reblagliati...".

La noticia, por lo directa, me dejó algo descompuesta: ¿El tío Manuel? Y yo pensando que el tío Manu era el "hombre de acero"...

El tío Manuel es el hermano de mi abuelita Cristina y uno de los pocos sobrevivientes de aquella rama familiar. Huallanquino de pura cepa, hablador hasta por los codos, deportista, amante de la naturaleza y de la vida sana. Casado más de cinco décadas con la tía Marina (que por lo acabada que luce, a su lado, parece ser su mamá), padre de cinco excelentes profesionales, abuelo y bisabuelo de una larguísima lista de muchachitas y muchachones.

A pesar de llevar, a cuestas, casi 80 años, el tío Manuel, es un atleta a tiempo completo. Cada vez que lo iba a visitar a su enorme casa de Chorrillos, siempre, me hacía una demostración de su destreza física y de su envidiable estado de salud. La última vez que lo visité, fue hace cuatro años y fiel a su costumbre me invitó, y en primera fila (S-VIP), a su espectáculo.

En el jardín de su casa, había un árbol que por sus dimensiones podría decir que era tan viejo como él. Era muy alto, robusto y tenía gruesas ramas y en un par de ellas había acondicionado un trapecio y unas argollas. Con el torso desnudo, mostraba su pecho de Tarzán jubilado y unos brazos perfectamente torneados; iniciaba un calentamiento que me provocaba mucha gracia, como cuando era niña. Respirando hondo, abría los brazos como una paloma a punto de echar vuelo y luego sobre el mismo lugar iniciaba una marcha rápida, tocando con las palmas sus rodillas que prácticamente daban contra su estómago.

Con toda la parsimonia, la pompa y el donaire de un cirquero se encaramaba con mucha agilidad en las argollas. Su piel, muy preta y su pancita de sapo disecado parecían a punto de estallar. Formando una cruz perfecta en lo alto me sonreía. Luego, pasaba al trapecio. Con mucha dificultad, apoyaba fuertemente sus manos en el trapecio; los músculos de sus brazos echaban humo; con los pies en lo alto parecía elevar una plegaria al cielo, para luego dar un par de vueltas. Yo, me sentía mareada de sólo verlo dar tantas vueltas como un trompo. Él, sabía muy claramente que me estaba impresionando y eso le complacía de sobremanera. Empapado su cuerpo en sudores descendía al suelo raso.

Allí no quedaba la cosa. Venían, ahora, las "planchas". Colocando su cuerpo sobre el suelo iniciaba una seguidilla de trecientas. Muy ufano me dijo que hasta un año antes hacía quinientas, pero, por una operación a causa de una hernia y por recomendación de su médico había tenido que reducirlas, muy a su pesar, a sólo trecientas. Yo, apenas puedo veinte y descansando todavía. Era su costumbre, cada cien "planchas" escupir pero al hallarme presente y por temor a ofenderme con ese detalle se aguantaba las ganas. Al final, me "regaló" veinte "planchas" más, pero éstas con una sola mano. Un excéntrico total.

Otros recuerdos que me abordan en éste instante, es ver al tío Manu en su bicicleta y haciendo piruetas sobre ella. Un loco adorable. Papá me contó que de joven, el tió Manu, se metió de torero. Aunque aficionado, era uno de los que más riesgo asumía. Temperamental y terco, como todos en mi familia, era infaltable en el toril de Huallanca todos los julios. Con más ganas que destreza se ponía al frente de cualquier toro. Una cogida le quitó de plano el gusto por la tauromaquia.

Su rostro bronceado, sus cabellos cenizos, su bigotito infaltable y esas arruguitas que se le formaban a la altura de los ojos cada vez que esbozaba una transparente sonrisa son entrañables. Cuando yo era niña, me cuentan, me levantaba con uno sólo de sus brazos y yo que permanecía quietecita en los aires como una perfecta partenaire.

La tía Marina había envejecido rápido. Cada vez que caminaban juntos era una constante ver a la tía Marina dar unos pasitos lentos y cortos y al tío Manu muy erguido apurándola. A pesar que el tío era un machista, ella lo adoraba. Era muy gracioso formar parte de una conversación con ellos. Una vez el tío Manu me explicaba como preparaban el jamón en Huallanca. Yo no estaba muy pendiente de los pasos a seguir sino de todos sus ademanes, sus gestos, muy ricos por cierto, como si cogiera una porción de nada y lo pusiera en un río inexistente... La tía Marina le corregía en alguna indicación mal dada pero el tí Manu la callaba toscamente y la tía me sonreía ("Así es...", parecía decir).

Bueno... ¿Qué más?... Te quiero tío Manu.

(Anoche papá y Laura llegaron del hospital. El tío Manu, aunque delicado está estable. El sábado le van a colocar un by-pass. El tío Manu tiene un enorme corazón y estoy segura que esta operación será tan sencilla como un par de "planchas".)

¿Tiene el periodismo límites?

Hay días en los que te levantas y sientes que toda la mala vibra se deposita sobre tu cabeza y la aplasta como a un huevo de codorniz. Hoy (ayer), parece ser uno de esos días...

Me levanté retarde; el maldito despertador se quedó dormido. Montada en cólera, cosa muy infrecuente, cogí al incompetente relojito y lo tiré contra la pared con tan mala suerte y peor puntería que le atiné a la ventana. El ruido del vidrio haciéndose añicos captó la atención de todos en casa. La primera en ingresar a mi habitación fue Marita y que me pregunta a boca de jarro: "¿Qué pasó?" y yo que "!Nada, nada...! con cara de pocos amigos. Al rato, entra Sammy envuelto en un cobertor y haciendo la misma pregunta: "¿Qué pasó?", obvio que obtuvo la misma respuesta y unos empeñones más de mi parte, haciéndolo salir de la habitación pues no me encontraba vestida para la ocasión. Tranqué la puerta y sentí unos nudillos golpeándola y papi con la misma pregunta...

Le pedí a Marita que limpiara el estropicio, mientras terminaba de cambiarme. Ayer, el tío Gustavo me llamó la atención por llevarle tarde un informe muy importante y ahora estoy prácticamente de tarde para llegar a la oficina. Le pregunté a Marita por qué no me despertó y ella me dijo que me había pasado la voz cuatro veces y en todas obtuvo respuesta, por lo que asumió que ya estaba puesta en pie.

Tomé el desayuno al vuelo y puede prestarle un oído al noticiero cuyo tema central estaba enfocado en el accidente de Pucallpa. Lamentable accidente, pero, que me movió más a la indignación por la manera cómo lo tomaron los periodistas que hacía su agosto en agosto...

Lo del periodismo no me es ajeno; mis padres son periodistas y supongo que yo en algún momento haré lo mismo. Sin embargo, veo con mucha pena como es cierto eso de que el periodismo puede ser el más noble de los oficios como también el más vil...

Las custers, para ir a la oficina, iban llenas y el único taxi que pasó cerca me quiso cobrar 30 soles para llevarme de Barranco a La Victoria. Me pareció exagerado. Vi un custer algo vacía y la abordé. Ya que iba a llegar de tarde tenía tiempo para ensayar en el trayecto alguna buena excusa.

Sin embargo, en el trayecto, lo único que ocupaba mi mente eran esas imágenes del accidente, las cientos de tragedias surgidas de él y las aves carroñeras buscando cualquier noticia. Lo que me jode es la inconsecuencia de todos ellos. En las últimas semanas he visto como han llevado las noticias y como muchas veces han formado a ser parte de ellas. Recuerdo el caso de la chica captada por un hombre a través del internet y vi con pasmoso asombro como transmitían una pelea entre los parientes de la chica y el hombre en cuestión. Después, cuando el hombre era conducido a la estación policial la periodista preguntándole: ¿Por qué lo hiciste... contesta... por qué lo hiciste?, como retándolo, me pareció un estilo más propio de Magaly Medina que de una profesional en las noticias. Según sé el periodismo es la profesión relacionada con la selección, clasificación y ELABORACION de la información que se transmite a través de un medio (escrito, radial o televisada). Sin embargo, las prisas, el obtener una primicia hace que pierdan las formas.

He sido testiga, a través de la tele, como cada vez que detienen a una persona por el delito de violación le hacen preguntas a boca de jarro y cuando presentan la noticia presentan a esta persona como violador. Pero, en el caso del familiar del presidente de la república implicado en un caso similar, lo presentan como "presunto violador", parece que algunos tienen corona. Quiero dejar de lado los informes de accidentes automovilísticos donde sin tino muestran imágenes terribles...

Escandalosos los reportajes de Panorama y no por algún reportaje de información que haya descubierto algo importante sino porque según ellos no pasa nada en el país. En las últimas emisiones se convirtió en un programa farandulero e incluso dieron tics de cómo bañar a tu perro. Definitivamente, los tiempos cambian. Vemos, como los programas políticos de los domingos se han convertido en muchos casos en programas con contenidos livianos. En el caso de Panorama, forzado por la coyuntura, por el problema del Gabinete tuvo que informar sobre este caso pero con una óptica totalmente parcializada. Ni mencionar la entrevista a Luis Toledo. No estoy hablando de un pasquín de 50 céntimos sino de un programa que llega a miles de hogares y que forma opinión. Lo de Belmont, en el 11, entrevistando a Fernando Olivera, en términos franeleros y buscando limpiar la imagén de aquel político tan desprestigiado me pareció sumamente patético.

En la noche, vi informaciones sobre la tragedia del avión de Tans. El canal siete puso una musiquilla lúgubre y un rótulo de "La tragedia de Tans" y la presentadora con una voz y unos gestos que denotaban "tristeza". Otros medios se dedicaban a entrevistar a heridos y sin respetar el dolor de las personas transmitían escenas desgarradoras.

Me preguntó yo: ¿Tiene el periodismo límites? Y no hablo de censura o autocensura sino de criterio y ética a la hora de transmitir una noticia.

Cuando esto pasé, cuando hayan exprimido el tema, supongo que buscarán otra noticia de qué sacar provecho.

Con más dudas que respuestas llegué a la oficina, sin excusas y dispuesta a enfrentar mi responsabilidad.

Coloca tu blog en el espacio; quizá los extraterrestres tengan más corazón:

http://www.bloginspace.com/

El "Cuco" ("Chucky me quiere matar...")

Desde nuestra más tierna infancia nos ha atribulado con la idea, la imagen, la noción, el concepto del "Cuco". Su nombre, era invocado, y con mayor énfasis, cada vez que nos negábamos, de manera pertináz, a probar una cucharada más del caldo, un sorbo de la mamila o durante una pataleta.

Nuestras reacciones, y llego a ésta conclusión después de haber hecho una pequeña encuesta entre mis amigos, eran disímiles. Hay, quienes se paralizaban; y en ésto, quiero hacer una salvedad; definitivamente, el miedo paraliza. Muchos padres, como he podido notar, asumen la inacción, la "parálisis" del niño ante una reprimenda como un reto a su autoridad y toman, en muchos casos, medidas que desvirtúan el papel de personas encargadas de nuestra educación y nos muestran lo peor del ser humano: La intolerancia. Otras reacciones, en nosotros inocentes párvulos, están ligadas con un estremecimiento que nos recorre de pies a cabeza, de manera sostenida, y en forma de escalofríos y espasmos nerviosos; nuestra mirada recorriendo los alrededores, parece buscar en torno nuestro a aquel ser siniestro, difuso e impresentable que sin anunciar su llegada, se materialice frente a nuestras narices y nos engulla con todo y zapatos. Pero, también están los chicos recancheros; aquellos que ni los monstruos ni aparecidos le mueven un pelo; es más, hasta esbozan una sonrisa divertida: " Va a tener que venir en mancha..."

El último fin de semana, traje a Valery conmigo. A pesar de sus engreimientos y de lo engreidora que soy, pasamos un sábado soportable. Eso sí, en la noche se negó a dormir sola.

A pesar, de que estaba "muerta" de cansancio, con los párpados a punto de cerrarse se negaba, tercamente, a ir a dormir. Tuve que recostarme con ella. Con su pequeño brazo cogiéndome del cuello, y casi sofocándome, se quedó profundamente dormida. No pude zafar y tuve que sacrificar mi sábado muy temprano. En la madrugada, liberada de su tenáz abrazo, me sentí de pronto zamaqueda. Arrastrada del cuello de mi camisón, fui a parar junto a Valery. Como pude colegir, a pesar de mi amodorramiento, Valery, al sentirse sola, me había buscado en la penumbra y cuasi arrastrado a su lado. Lo que más llamó mi atención de todo ésto, fue percibir con total claridad en la voz de Valery: "Chucky me quiere matar" y luego quedar nuevamente dormida teniendo a la prima (yo) de corbata. De rato en rato se removía, parecía tener una pesadilla y yo le dije muy quedito en el oído: "Estoy contigo Vale. Nadie te va a ser daño. Y si viene yo le saco la m...". Valery quedó tranquila, pero yo con la conciencia sucia al no haber encontrado una respuesta más adecuada para la situación. Y no lo digo por la "lisura" sino porque de alguna manera le hice entender que existía aquel ser de sus miedos. Esperando que con la luz del día mis pensamientos se aclaracen, quedé dormida.

A la mañana siguiente, desayunamos con total calma y no fue necesario sostener aquella charla. Así es que la postergué. Sin embargo, de camino a su casa, sentadas en la parte posterior del auto, después de estar mirando por la ventanilla del mismo, la vi saltar a mis brazos y repetir: "Chucky me quiere matar...". Me asomé por la ventana y lo único que vi fue a un tipo poco dotado de gracia pero diferente a aquel insulso muñeco. Tenía que hablar con Valery, como también con su madre.

Considero que infringir miedo a los niños los torna inseguros; ahora pueden ser fantasmas, cucos o chuckys y más adelante ¿qué? Siempre nos mostramos pendientes de cualquier amenaza infundada o no y en buena parte ejerce cierto dominio sobre nosotros. Nuestro temor o atención no debe de caer en seres inmateriales sino en seres de carne de hueso. Si me quieren asustar con un fin alterno sólo bastaría con decir "¡vuelve el "Chino!" o "Alán es el seguro próximo presidente", allí, sí habría que temer..., pero, dejando de lado mis absurdas bromas, no considero que sea bueno dominar a los niños inculcándoles el temor, pues, a la larga aparecerán otros, miedos, en su vida que serán los peores obstáculos para llegar hacia sus metas.

Películas Peruanas

En lo últimos cinco años, según Conacine, en el Perú se han exhibido, un promedio de cuatro películas por año. Algunas con más éxito que otras. Aunque, aquí, la palabra éxito no indica necesariamente que la película sean una obra maestra...

(Luis Alvarez y Pablo Serra en una escena de "La Ciudad y los Perros"

La película peruana, a la que mayor afecto guardo es, "La ciudad y los perros", basada en la novela homónima de mi escritor favorito, Mario Vargas llosa. Fue llevada al cine por Francisco Lombardi y el resultado sin temor a equivocarme una de las mejores producciones peruanas. Un punto a destacar es el impresionante elenco: Pablo Serra, Gustavo Bueno, Eduardo Adrianzén, Juan Manuel Ochoa, Aristóteles Picho, Miguel Iza y otros que aún están en vigencia. Algunos de ellos se dedicaron a la producción de cine en España.

("Poeta" y el "Jaguar". Escena de "La ciudad y los perros")

Francisco Lombardi, es unos de los pocos directores peruanos que guarda una cierta regularidad en sus producciones. "Pantaleón y las visitadoras", también basada en un libro de Mario Vargas Llosa resultó un "buen producto", comercialmente hablando. Otras que recuerdo son la "Boca del lobo" con Toño Vega en el papel de un policía, testigo de muchas crueldades y totalmente desencantado de su cuerpo policial.

Películas peruanas que han calado en mí, Como lo menciona Lobito, "Gregorio" (Marino León) del grupo Chasky fue en su momento, como he podido corroborar, todo un boom: Un millón de personas la vió en el cine. Lastimosamente las posteriores producciones del grupo Chaski cayeron dentro de lo liviano y perdió, en buena parte su esencia. Que recuerde, si me equivoco corrínjame por favor, otras películas del grupo Chaski fueron: Juliana, Corre, Anda y Vuela, Ni con Dios ni con el Diablo (no estoy segura si les pertenece) y otras de onda social y teniendo como base la violencia terrorista sufrida por nuestro país.

("Gregorio", Grupo Chaski)

Recientemente se ha puesto en exhibición películas que tienen como escenario la Lima urbana: No se lo digas a nadie, Doble Juego, Ciudad de M, Muerto de Amor y otras donde se pone sobre el tapete la rebeldía de los jóvenes y otros problemas. Sin embargo, tengo muy pocas cosas que destacar de ellas.

Han habido, películas cómicas o comedias como es el caso de "Mañana te cuento" y "todos somos estrellas".

Las pelis de acción, también han tenido su lugar; aunque, hago la salvedad que de cierto modo levantan y apologizan la delincuencia: "Alias la gringa", "Django" y una antiquísima "Avisa a los compañeros".

He visto, películas muy curiosas, como: Jarjachas 1 y 2 que me dejaron pasmosamente sorprendida por su bajísima calidad. El coste, la plata, el dinero no es la mejor excusa ¿eh? Allí está también "Un marciano llamado deseo" con la participación estelar de Christian Meier, y que no pasó de ser una mediocre película; para la gran mayoría la peor película peruana de todos los tiempos; sin mencionar, las películas de Susy Díaz y otros abortos.

Una película que pasó sin pena ni gloria por las salas fue Mama Coca, película de Marianne Eyde que no duró mucho en cartelera. Aunque hay que destacar el hecho que Mariana, tiene en su haber "La vida es una sola"; una magnífica película que, lamentablemente, no tuvo la acogida esperada. Uno de los puntos flacos fue la temática un poco gastada de la violencia terrorista. Conversando vía MSM me hicieron la salvedad que la peli "Paloma de papel" debía su éxito en buena parte (y no de manera santa) a "La vida es una sola".

Otras que recuerde, "Ojos que no ven", aunque diré que en su momento no la entendí mucho. "Maruja en el infierno", me pareció rara pero buena. "Días de Santiago", no estuvo mal aunque la parte marketera, la onda de los festivales también pesa bastante.

Me encantó la conversación vía MSM de esta mañana, por la intención de algunas personas de recomendar películas peruanas en el extranjero. Tengo muchas dudas, como también, sé que he hecho muchas omisiones y emitido juicios y comentarios personales que pueden entrar en contradicción con otras opiniones. Lo bueno de la internet, es que te puede conectar con muchas personas que están más al pendiente en lo que a Cine se trata. No sé si alguien me pueda ayudar pero me encantaría saber cuál fue la primera película peruana exhibida comercialmente. Como también me gustaría saber sus opiniones sobre películas peruanas que les hayan gustado. Sé que hay muchas películas malas pero en este caso me gustaría saber sobre las mejores, sobre las que vale la pena dedicarle algo de nuestro tiempo y recomendarlas a nuestros amigos del exterior.

¡Maldita gata!

A las pocas horas de publicar mi primer post (Yo amo a mi michi), teniendo como tema central mi relación, nada indulgente y poco fructífera con los felinos caseros, recibí, sendas notas conminatorias con el fin de resquebrajar mi posición y cambiar mi actitud. Yo digo: Lo que no nace, no crece; así de simple, así de sencillo. Como respondí en aquel momento, respondo ahora, adelantándome a lo que ha de venir: NO TENGO ojeriza alguna en contra de los gatos; en todo caso, para que entiendan mi actitud, soy víctima frecuente de sus acciones. En su momento conté, como fui casi asfixidada por un minino y conté, también, lo de la "patadita" (al estilo Alan García pero con un justificación valedera) que le propiné, de refilón, a aquel gatito y que fue por una cuestión defensiva de forma inconsciente y totalmente inocente (si no lo entienden, pregúntenle a mi psicólogo...).

Y a todo esto, muchos dirán, ¿un refrito?, !otras vez con los gatos! o los más sensatos: "a mí que MIchi me importa...". Bien. Si estuvieran en mis zapatos (supongo que les apretarían los pies) y no tuvieran otra forma de expresar su desazón y malestar, estoy segura, sin temor al yerro que, actuarían de la misma forma que yo o quizá, un poco más allá...

Para una persona que trabaja, como supongo es el caso de todos, resulta realmente funesto y malhadado tener que soportar noche tras noche el concierto desafinado por parte de un coro gatuno. Y quien pone la voz cantante, con un falsete desafortunado es una gata "alunada" que no tuvo la mejor idea que traer a todos sus pretendientes a un lado de mi ventana. Yo, siempre fui desorejada para la música y para el canto, pero creo, y creo fehacientemente, que ésta gata me saca cientos de cuerpos de ventaja.

Mi habitación, ubicada en el segundo piso y parte posterior de mi casa, colinda con los patios traseros de los vecinos y de mi propia casa. Ellos, están cubiertos de deleznables calaminas y toldos que convierten todo este enorme espacio en un lugar inexpugnable para "doña flor" y su decena de maridos. Tener que escuchar, a fuerzas, agudos y constantes tañidos me han tornado en los últimos días en una insomne.

Algunos vecinos, han planteado la "sutil" solución de darles bocados envenenados. Pero, éstas propuestas han contado con la tenáz oposición de los propietarios de algunos de los gatos directamente vinculados con los incidentes en discusión. Doña Chelita, dueña de la gata, ha dicho muy frescamente que es cuestión de días (y de noches) para que le pasé la "luna" a su "adorada" mascota y con ello las incomodidades. Finalmente, después de vanas discusiones no se ha llegado a acuerdos tangibles ni consensuales.

Ayer, por la noche, Sammy, después del colegio, llegó a casa trayendo de manera camuflada una carabina de presión de aire, de aquellas que lanzan perdigones.

A Sammy, le hemos acondicionado una habitación en el primer piso de casa y muy cerquita del patio y jardín. Está firmemente decidido a no dejar que nada ni nadie estropeé sus sueños.

Anoche, tarde, muy tarde, oí el sonido de la carabina escupiendo perdigones y decenas de patitas golpeando las calaminas. De tanto en tando un quedito lamento que se perdía en la quietud de la noche. Un par de veces más, se repitieron las escaramuzas. Sammy, parecía estar pasándola rebien alucinándose el pequeño vigía lombardo. A este paso, vamos a ver muchos gatitos desnarigados.

Tengo que manifestar mi más firme oposición contra toda forma de violencia que vaya en desmedro de pequeñas, aunque jodidas, criaturas pero en este caso... me abstengo de presentar mi opinión.

(Aviso: Ninguno de los gatos presentados en este post han sufrido lesiones de consideración. Los golpes infringidos por los perdigones ha sido direccionados a zonas no vulnerables y con muy poca carga de presión. La mayor parte de los disparos han sido realizados a modo de apercibimiento (con muy poca fortuna, pobres gatos). Los gatos no han necesitado en las escenas de riesgo de dobles...)

"Mañana te cuento..."

La estereotipia en el cine peruano

Anoche, con mucho de retraso, fui a la exhibición de "Mañana te cuento". Ya saben, como una forma de apoyar a la producción nacional y de decir no a la piratería... Llegué con prisas a la boletería que se mostraba semi-desierta. Sin embargo, la colilla para ingresar a una de las enésimas salas donde se exhibía la dichosa película estaba más larga que corbata de jirafa.

La cola era enorme,daba a la calle, y el friecillo nocturno que hacía insufrible la espera. Decenas de parejas de tórtolitos y no tan tortolitos a través de arrumacos se daban calor y yo, muerta de frío... Chicos, que parecían estar en los catorce o menos fumaban buscando, con ello, proyectar la imagen de dandys o de gente mayor. Pero, lo que llamó mi atención, últimamente estoy muy susceptible, fue ver a familias enteras con niños incluso, esperando ingresar a la sala. Pensé que era una exhibición para mayores. Quizá, se queden en los juegos dentro del cine, me equivoqué... Apenas, abrieron las puertas y la multitud, sin formas ni maneras, se agolpa por ganar un asiento. Decenas de niños corriendo, cogiendo asientos y gritando, a voz en cuello, y llamando a sus padres. Extrañaba mi DVD.

La peli, no pudo tener mejor inicio que un niño llorando. La madre totalmente desubicada recién lo retiró de la sala cuando un par de señores le llamaron la atención. No había ni un encargado del local en lugar visible; seguro que era el día descanso de muchos de ellos... De la película no queda mucha por destacar; a las pelis nacionales les hace falta una inyección de kuáker y de buen gusto. Fue una comedia ramplona, básica y a pesar de sus "enredos", predecible. Si vamos al terreno de las comparaciones y la comparamos, valga la redundancia, con un "Marciano llamado deseo", entonces diré que fue una pela excelente... ¡Vamos!, después de ver ese mamotreto de "Un Marciano...", cualquier pela es buena e incluyendo a las de Susy Díaz. El día que fui a ver esa película, por Meier, le cogí anticuerpos a las pelis nacionales.

Cambiando mi postura ahora, diré que, no tengo nada en contra la alicaída producción nacional (calidad y número). Si su fin, me refiero a ustedes, es divertirse y llevarse una sonrisa fácil a la boca, ¡vayan a ver la película! Si su fin, y entendible ¿eh?, es ver, a sus actrices favoritas desnudas (Angie Jibaja, Melania Urbina,Milene Vásquez), ¡vayan a ver la película! Si son fans, a muerte, de Melania, y la adoran ataviada de "terruca", de "chica dinamita" o últimamente como clon de Dina Páucar... ¡Vayan a ver la película! Sólo una cosa, y conste que se los advertí ¿eh?, no reclamen el valor de las entradas a la salida..., no hay devolución...

Quizá sea un juicio apresurado o que el rumor de la sala me impidió ver con detalle la puesta en el ecrám... Compré un DVD, que vendían en la puerta del cine, con la intención de verla nuevamente (y "Mañana te cuento) y dar una segunda opinión... !Y no lo olviden... a la piratería dile NO!

Pasión por las pelotas

No voy a empezar éste artículo con el clásico: "Desde que tengo uso de razón..."; me parece patético, gastado y falto de ingenio a la hora de empezar un escrito... Sin embargo, desde que tengo uso de razón, siempre me he dejado influenciar, alienar y de cierta forma pervertir por refranes, dichos u otras formas de sabiduría popular. Oí una y mil veces que, "el fútbol enciende pasiones"; que, "el fútbol une a los pueblos" y una de las últimas , o no tanta, "la pelota no se mancha"... Y es cierto todo esto ¿eh? Ayer pude comprobar cada una de estas expresiones...

"El futbol enciende pasiones". A propósito del denominado "Clásico Moderno" (qué contradictorio suena eso, "clásico moderno", a quién se le pudo haber ocurrido algo tan descabellado o tan sin sentido. Que yo sepa, desde mi humilde opinión, los clásicos son clásicos, más nada...), grupillos de aficionados de los equipos, que horas más tarde estarían enfrentándose en un encuentro deportivo, estaban, ahora, apostados, uno frente al otro. No lo ví, me lo contó Sammy que, tuvo la mala de suerte de pasar justo por ahí, cuando las "pasiones encendidas" estaban a punto de estallar como volcanes. Un grupo inició el lanzamiento, sin destino preciso, de piedras (como Luis Toledo contra los periodistas. Aunque en ese caso, los periodistas servían como pared de frontón...), Sammy no tuvo otra mejor idea que correr de manera desbocada ("la salud está primero...") para salvar su vida y sus zapatillas nuevas. Yo estaba entregada totalmente a una larga y amena conversación con mi amiga Mafis cuando oí la puerta retumbar. Fui corriendo hacia ella, y pude ver, tras la ventana, a Sammy con una patética y graciosa expresión de horror en su rostro y señalando la puerta. Apenas la abrí y entró a empellones junto con un grupo de ilustres desconocidos que, por la pinta y talle parecían haberse escapado de un reformatorio. Para impedir el ingreso de más gente, no invitada, tuvieron que empujar la puerta y dejar a los demás, "ocasionales transeúntes", fuera y que sigan su desenfrenada carrera. Todos jadeantes y nerviosos, dentro de mi sala recién encerada, mantenían en sus caras un rictus de incredulidad y desconcierto. Me asomé a la ventana y vi muchos chicos correr detrás de otros chicos, aunque no de manera amigable...

"El fútbol une a los pueblos...". ¿Sí como nó? Cada grupo de aficionados enfundados con los colores de sus equipos parecían muy unidos, envalentonados y dispuestos a demostrar, temeraria y estúpidamente, cuál equipo era el mejor en base a matonadas o quién roba más a los pobrecillos ambulantes que encontraban a su paso... Con la fuerza y las costumbres de "búfalos" (sin alusión a los apristas, porfis) saquearon todo comercio que hallaron en su camino. ¿Y la policía? Bien, gracias. La última vez que vi a un policía por aquí. Fue precisamente en un día de "Clásico". Y lo vi correr..., detenerse era un suicidio pues le llovían piedras y meteoros de un grupo de chicos "incomprendidos" por la sociedad: el lanzar piedras también es una arte (las tiran y casi nunca les caen a ellos mismos ni a sus rivales pero sí a nuestros autos y casas).

"La pelota no se mancha", esta frase la dijo un apóstol (o un Dios) del fútbol y tiene mucha razón, las que se manchan son las cabezas, generalmente de inocentes, con cada pedrada en nombre del sacrosanto fútbol.

Me han invitado, muchas veces a asistir a los estadios para apreciar un encuentro de fútbol y he desestimado esas invitaciones por dos razones:

1) Me parece de mal gusto y hasta descortés invitar a una señorita a un espectáculo que se da mayormente fuera de la cancha: en las calles y plazas, un espectáculo nada agradable.

2) Odio al fútbol, porque me parece estúpido ver a gente grande dándole de puntapies, rodillazos y testarazos a una pobre e indefensa pelota. Y no me gusta el desorden, el caos y menos el abuso...

Y una más:

Tres: Odio que usen este deporte para ilusionar y mantener a la gente estupidizada ¿Y a quién no? Después del 3-1 ante Chile, ahora resulta que de seguro vamos al Mundial...

¡ A mi culo se le respeta...!!!!

Como una forma de sacar a flote mis estudios (voy a necesitar un equipo de hombres rana y un par de submarinos para lograrlo, o por lo menos un fontanero que me rescate del entrampamiento...), un tanto descuidados últimamente, he llegado a un acuerdo salomónico y satisfactorio con el tío Gonzalo. Trabajar, solo hasta el mediodía o un poco mas, y conservando el 80% del sueldo de tiempo completo. Para lograr este último punto no me fue necesario hacer plantones, marchas y menos una huelga de hambre (suficiente con mi dieta); sin embargo, tuve que lidiar, de manera denodada, con la gerente administrativa que se mostró, en todo momento, astutamente obtusa en rebajarme el sueldo hasta en un famélico 50%. Un abuso, vieja usurera, ¿cómo diablos podría sobrevivir con 1250, y soles encima? Después de tensas y largas negociaciones, el humo blanco cubrió una atmósfera sobrecargada de ajos y cebollas. Conservé el 80% de mi sueldo y como dijo aquella novia, después de una no muy recordable noche de bodas,“algo es algo...”

El lunes, salí de la fabrica 12:30 en punto y me dirigí a casa de Tía Elsa, ubicada en Santa Catalina, recerca. No encontré a la tía, solo estaba su empleada. Dorita que, con mucha prisa me abrió la puerta (también quien va a aguantar el repique incesante del timbre bajo la opresión tenaz de mi dedo índice); aun jadeante me invitó a pasar. Me moría de hambre pero tenia que mostrar fuerza de voluntad y más aun cuando Dorita trajo un humeante y apetitoso guiso que parecía decir, de manera insinuante y descarada, “cómeme”. Rechacé, con mucho pesar, aquel platillo y solo pedí un par de hojas de lechuga (¿la dieta de la tortuga?). Desde que empecé la dieta, los resultados han sido desalentadores, tengo mas hambre, languidezco en energías y no he bajado un maldito gramo...

Dorita salió a hacer unas compras cerca. Y yo me aburría contemplando una mosca planear sobre mi lechuguita... Diablos, el día me estaba saliendo de cabeza. Encendí la tele para buscar algo de entretenimiento mientras llegaba la tía que había salido a recoger a los niños del colegio. En la tele estaba dando un programete de medio día, ¿Gisella? No. Mas bien parecía su hija... una rubia patilarga, con una enorme sonrisa dibujada en su rostro le rendía un homenaje, por sus treinta años de vida artística, al gordo Casaretto, ¿qué quién es el gordo Casaretto? Silencio. No sé. Y me pareció reraro que con treinta años de carrera no recuerde su nombre de alguna película, la marquesina de un teatro, una exhibición pictórica, fotográfica o de una pelea de perros... Definitivamente, el Perú es Super... ¿Cuándo le haremos un homenaje a Jorge Eduardo Eielson o a alguien que verdaderamente valga la pena?... Cansada de pizarritos, sofias mulanovichs u otro “referentes” del éxito en el Perú, di por terminada mi corta relación con la caja boba. La tía, debería de poner cable, porque con esos contenidos en la tele nacional bien podría hacerse de un aneurisma inconmensurable.

El silencio reinante hacía más evidente, la guerra civil que se venía desarrollando en mi estómago. A fuerza de la inexistencia de algo tangible dentro de él, el intestino grueso parecía devorar al delgado o viceversa... Me arrepentí de haber rechazado el convite. Me c$&% de hambre. Con mi fuerza de voluntad echa trizas por enésima vez en esta semana me dirigí a la cocina. Bueno, si pruebo un par de cucharadas de aquel delicioso guiso no creo estar rompiendo del todo lo “estricto” de mi dieta. Sin embargo, no fueron un par de cucharas sino un par de cucharones que probé con fruición. Dorita, tenia buena mano para los guisos... Tenia sed. Y sobre el refrigerador una jarrita de chicha morada que se destacaba sobre lo blanco de la cocina. Sin mucha delicadeza bebí un vaso. La sentí algo amarga y desabrida; parecía que le faltaba azúcar o que habían exagerado con la canela...

Dorita, regresó enseguida. Dejó sus compras sobre la mesa y busco la jarrita sobre el refrigerador. Al no hallarlo, en primera instancia, la buscó sobre la cocina y ¡bingo!,la halló y cogiéndola de una oreja arrojó su contenido en el lavabo. Le increpé su acción, "¡que falta de compromiso social, por Dios!", y ella me dijo que estaba malograda (¡Plop!). Horror, "pero por qué la dejaste sobre el refrigerador en vez de tirarla de una vez...", le pregunté algo nerviosa. "Sonó el timbre y corrí a abrir la puerta...", me dijo con cara de boba y lo que sigue ya lo conté...

Apenas me puse al corriente del radiactivo contenido de la jarra, empezaron los cólicos y retortijones. Llamé al doctor Sihuas desde el movil. Tardó en llegar, y los segundos que se hacían eternos... y yo que me sentía morir. Sin “exagerar” vi desfilar todos los aspectos de mi vida en una especia de resumen semanal y sin cortes comerciales. Espero que cuando el doctor llegué no sea solo para confirmar mi deceso... ¡Te odio Dorita, a ti y a la maldita chicha...!

El doctor Sihuas, me hizo abrir la boca cuan grande era y me hizo, también, desenrollar la lengua. Me hizo otros exámenes externos y al final sentenció gravemente: “No tienes nada niña...”. “Pero, doctor y... ¿ los cólicos? Me puede dar malaria o cólera...”. Como medida preventiva me dio de entre sus muestras un sulfa no sé que para la infección. Y yo dale: “¿Y si más tarde o justo cuando Ud. Se va me vienen peores síntomas qué hago...? – casi gritando. El doctor Sihuas, esgrimiendo una tranquilidad pasmosa, dijo muy suelto de huesos: “Si quieres te llevo a la clínica y te aplicamos un enema...”. “NOOOO!!!! Creo que ya me siento mejor...” . Prefiero mil veces morir de un cólico que, convertir una simple dolencia en una sesión sadomasoquista... Después de todo, a mi culo se le respeta...

La Vida y la Muerte

(En memoria de Jérico)

Dicen que, si las cosas pasan, es por algo..., ¡qué estúpido criterio! Dicen, también que, somos arquitectos de nuestro propio destino..., bueno, me parece menos estúpido pero... Sin embargo, pienso yo que, no somos dueños de nuestra vida y destino, sino que, estamos supeditados al entorno, a las circunstancias y al azar.

Hace un par de días, ocurrió un hecho trágico y lamentable, hecho que aun cohabita entre mis pensamientos... Jérico, un chico de 15 años aproximadamente, único sostén de su familia (un par de ancianos) y estudiante del colegio donde también asisten mis primas (Daniela y Cristina), murió, frente a muchos niños, horriblemente. Hechos, de esta naturaleza, inesperados y sorpresivos, me llevan a pensar sobre la vida y su fragilidad...

“Si las cosas pasan es por algo...”, no me parece la mejor frase que sirva de consuelo a un par de ancianos que se quedan, ahora, aparte de dolidos por la irreparable pérdida, en la más cruda incertidumbre. Jérico, buen o mal hijo era quien llevaba el sustento a aquel humilde hogar. ¿Resignación sería la palabra adecuada para sus padres? “Resígnense señores... a morir lentamente...”.

Jérico, buena o mala persona, tenía una familia, tenía un hogar, tenía una novia, tenía, como bien pueden afirmar sus amigos, enormes ganas de vivir. No se arredraba ante nada ni ante nadie, se sentía bien encaminado... ¿A dónde? ¿A la nada? ¿A dejar sus sueños truncos? ¿A dejar a sus padres desamparados y a su novia sola? ¿Él luchaba cada día para acabar así...?

Circunstancias, azar, terrible fatalidad... Nadie tiene la vida comprada, nuestra vida es como la llama de una vela que se extingue ante la menor ráfaga de viento...

Hace tiempo, que no pensaba en la muerte. Me parecía una pérdida de tiempo dedicarle algo de espacio dentro de mi vorágine vivencial. Sin embargo, la muerte, marcha a nuestro lado y a cada instante. No la miro con temor, el temor paraliza, pero si con respeto, y no me detengo por ello...

Historias y finales trágicos e inesperados ocurren cada día, y en contrapartida, se dan historias con inicios esperanzadores y “finales”, idealmente, felices. Tengo que vivir mis días como si fueran los últimos, alejada del pesimismo, de temores que detengan mi avance pero que no me vuelvan inmune al dolor o me tornen indiferente a lo que ocurre a mi alrededor. Pensar que mi breve paso en esta vida deja huellas..., huellas que otros, pueden seguir y continuar el camino, el eterno camino... Después de todo, si las cosas pasan, y pasan por algo es por dejan, con dolor o sin él, enseñanzas...