Hasta las últimas consecuencias

No bebo, ninguna clase de bebida alcohólica, por la debilidad de mis piernas, ¿me tiemblan? ¡Noooo!!!! Se me abren... Una fiesta sin bebida no es fiesta; no generalizo, sólo me expreso de acuerdo a mis experiencias... Supongo, que también hay reuniones de abstemios o en las que se bebe sin caer en la exageración y se las pasan bacán; sin embargo, si existen éstas personas, están en vías de extinción.

Juergues, Viernes (Sábado chico), Sábado... Nos pican los pies y los dientes, por bailar y chelear. Cualquier sitio es bueno con tal que éste prometa y muestre las condiciones para que la movida sea inolvidable.

Toda la semana, la TV nos ha bombardeado con mensajes nada recatados, induciendo a los gansos, a beber como vikingos. El gancho de las chicas semi-desnudas y semi-fáciles despierta a los más inhibidos, convenciéndolos, que en el fondo de una botella, van a encontrar a una chica linda y fácil (la verdad, con tanto tragos encima pueden estar pasándola bien con la abuela y sentirse en los brazos de una sirena, sonámbula o de los de la chica por la que babean toda la semana). El machismo, como vemos juega un papel crucial en este bussines. Lá última propaganda (de esta semana...) nos muestran a chicos y chicas bailando en medio de una pista de baile, muertos de sed y cansancio, y como salvadora, de la situación que afecta su desenvolvimiento en todos los ámbitos, aparece una chela bien helada que les devuelve los bríos para seguir con la juerga. Obviamente, no muestran los detalles después de la fiestita. Todos somos testigos de lo que pasa después de una fiesta sin límites...

"Tome con Prudencia" reza un aviso y los más avispados buscan a Prudencia, a Genoveva y a un par de flacas más que les hagan la noche redondita. Un par de cajas de chelas más o, los que están escasos de recursos, bebidas más baratitas que acorten los caminos a la inconsciencia y a la estupidez.

Te recuerdan que no bebas en exceso, que si manejas no bebas y demás pamplinas, pero, ¿a alguien le importa eso, cuando ya está embalado ?... No te recuerdan, en cambio, que la bebida te resta habilidades, sentido, juicio y equilibrio; en resumen, que te convierte en un imbécil. Total, la fiesta es hasta las últimas consecuencias... Y hasta punto quería llegar...

Uno de mis mejores amigos, Gian Pierre, acompañado de otro amigo, salieron de una fiesta en estado calamitoso y fueron atropellados, y lanzados por los aires, por un auto. El chofer, lejos de auxiliarlos les pasó el auto encima con la idea de no dejar testigos molestos, emprendiendo, luego, rauda fuga.

De manera milagrosa sobrevivieron, pero, quedaron hechos papilla. El amigo de Gian, resultó con las dos piernas fracturadas, moretones por todos lados y una elevada cuenta hospitalaria (va a tener que trabajar duro un par de años para pagarla). Gian, resultó con el hombro luxado, una pierna fracturada y un fuerte golpe en la cabeza que lo dejó inconsciente por tres días. Cuando despertó, hecho un loquito, trató de reincorporarse por lo que tuvo que ser sedado. Han pasado tres semanas del accidente, Gian ya está en casa. Perdió su vuelo a España, programado para el 26 de Junio y de paso su empleo por esos lares. La tomografía y exámenes neurológicos no han arrojado problemas graves; sin embargo, hace dos días lo vi vía Webcam y la verdad es que no lo reconocí... yo lo recuerdo, alegre, conversador y con unos inquietos ojos. El que ví era otro; totalmente retraído, la mirada fija fría... estaba hecho un imbécil. En el fono, no pudo hilar más de tres palabras seguidas... Me duele mucho verlo así, pero se lo tenía merecido por estúpido. Yo lo quiero mucho y me revienta esta situación. Ya sé que los accidentes se pueden presentar en cualquier momento, pero éstos se presentan con mayor frecuencia por nuestro propio descuido y esa falta de amor propio. Espero que te restablezcas del todo, Gian, y que aproveches esta segunda oportunidad que te da Dios o el diablo.

Espero que no te pase a tí, porque una segunda oportunidad puede no estar dentro de las opciones.